El blog de josecampos

Para comenzar a estampar camisetas debemos tener una base muy clara: los productos que utilicemos han de ser los  mejores para poder desarrollar bien esta técnica Y nos referimos tanto a la camiseta, como a la pintura, como a los utensilios necesarios para el perfecto acabado del estampado.

Comenzando la técnica.

Lo primero que debemos saber es lo que queremos, es decir, saber qué vamos a estampar, cómo, en qué color y dónde (camiseta, sudadera o short), ya que esta técnica se puede utilizar para todos estos tipos de artículos.

Partimos de la base de la estampación de un dibujo en color oscuro. Para  ello, debemos coger la  prenda a estampar, que debe ser de una calidad igual o superior a cien por cien de algodón, ya que son las que mejor quedarán.

Cuando sepamos el dibujo a estampar, deberemos tenerlo del tamaño que lo queramos, y encargar un fotolito en una imprenta. Con este fotolito, podremos encargar, en la misma imprenta, una plancha, que es el molde que nos permitirá el estampado de la prenda.

Tendremos que conseguir una base de pintura especial para textil, y que hará que nuestra prenda quede estampada en el color deseado.

También deberemos tener una paleta o brocha para impregnar la pintura, y una placa pequeña, preferiblemente de plástico, que más adelante diremos para qué se utiliza.

Manos a la obra.

Lo mejor es realizar el trabajo sobre una mesa grande, la cual nos permita tener a mano todo el instrumental a utilizar.

Una vez cómodos, pondremos la prenda a estampar encima de la mesa, teniendo en cuenta la posibilidad de que la pintura traspase a la parte de atrás de la misma. Para evitarlo, pondremos una madera cuadrada, tipo la de cortar comida o similar, para que esto no suceda.

Colocamos la plancha del dibujo sobre la prenda. Cogemos la pintura, teniendo en cuenta que debe estar liquida, pero con cuerpo. Una técnica sencilla para comprobar esto es que cuando mojemos la paleta o brocha en ella, debe chorrear un poco, pero no mucho.

Con la paleta o brocha bien mojada en pintura, empezamos a pintar sobre la plancha, no importando el exceso de pintura. Una vez pintado todo el dibujo de la plancha, cogeremos la placa de plástico, y la pasaremos por el dibujo de la plancha, arrastrando el exceso de pintura hasta el mismo lateral del marco de la plancha. Esta pintura es reutilizable, por tanto se puede poner otra vez en el bote.

Con mucho cuidado, se levanta la plancha poco a poco  para ir viendo la estampación a medida que la vamos levantando, siempre con mucho cuidado de ni rozar la pintura. Limpiaremos la plancha cuanto antes, ya que si se seca, quedaría inutilizable.

La camiseta está casi lista, ahora la tenderemos, esperaremos a que se seque, dos horas más o menos y ya está, tenemos nuestra camiseta estampada y lista.

Post para el concurso de El descuento:

Post concursante en http://blogger.eldescuento.com/concurso